Después del rosa, viene el naranja, otro smoothie delicioso. Me gusta mucho porque el mango le da un toque diferente. Además, así con la excusa, salgo de la zona de confort y compro fruta que no suelo comprar a menudo.
Después del rosa, viene el naranja, otro smoothie delicioso. Me gusta mucho porque el mango le da un toque diferente. Además, así con la excusa, salgo de la zona de confort y compro fruta que no suelo comprar a menudo.